No se trata solo de viviendas, sino de los sueños e ilusiones de muchos caldenses que confiaron en un gobierno que después de paso por el Palacio Amarillo de la Plaza de Bolívar en Manizales, ha demostrado que la promesa no pasó de ser en muchos casos, un engaño, una farsa. Su estrategia no se centró en construir casas, sino en jugar con las esperanzas de muchas personas humildes y necesitadas.
Mientras tanto, muchas familias, mil en total, se quedaron esperando la solución prometida. Aterra que después de haber incumplido la promesa de entregar las viviendas y luego de múltiples incumplimientos, ahora salgan a predicar y alardear en redes y eventos sociales sobre la contribución al desarrollo regional, para lo cual se ufanan desde una posición internacional, a pesar de no haber cumplido en el ámbito departamental.
El cuatrienio pasado, en materia de gobierno, no fue precisamente lo mejor para Manizales; pero habrá que decir que también fueron años aciagos para Caldas. En Manizales, una planta de tratamiento de aguas residuales incumplida; en Caldas, 12 mil millones de pesos reflejados en ilusiones destrozadas.
No sobra decir que las casas «en el aire» tienen en calzas prietas a varios exalcaldes que pusieron los recursos municipales a disposición del gobierno departamental para que se cristalizaran los sueños de vivienda de sus paisanos. No obstante que ahora no aparecen las casas, pero tampoco devuelven los recursos.
Para ajustar el gris profundo del panorama lamentable, habrá que decir que las pocas casas entregadas fueron terminadas a costos cercanos a 231 millones cada una, por más que su tamaño y terminados las hagan valer muchísimo menos si los propietarios las pusieran en venta. A lo anterior habrá que sumarle sendas preocupaciones y dudas en lo referido a licencias y permisos.
El actual gobernador de Caldas, Henry Gutiérrez, mencionó la pérdida de 12 mil millones de pesos en el cuestionado proyecto, un dinero irrecuperable, ya que formó parte de un anticipo no cumplido y sin pólizas de cumplimiento. Seguramente, en su libro «Gobierno, desafíos y decisiones», descubriremos el paradero del dinero destinado a las mil viviendas que prometieron y no cumplieron.
Ya están colocando afiches que hablan de múltiples viviendas desaparecidas, ante lo cual se ruega a cualquiera que las haya visto o tenga cualquier información que ayude a dar con su paradero, que informe a las autoridades competentes.
No olviden que necesitan su ayuda para dar con el paradero de múltiples viviendas desaparecidas.
